El buen camino y el mal camino

El buen camino, ¿ cuál es el buen camino ?

¿ Aquel que nos hace sentir bien con nosotros mismos ?

¿ Aquel que nos hace sentir que somos útiles ?

¿ Aquel que nos hace sentir que formamos parte de algo ?

Para que esta definición exista es que tiene que haber una opuesta...

El mal camino, ¿ cuál es el mal camino ?

¿ Aquel que nos hace sentir mal ?

¿ Aquel que nos despierta nuestro "lado oscuro" ?

¿ Aquel que nos hace sentir un vacío en el interior ?

Ahora hablo de mí, como siempre he dicho, porque soy la persona que más conozco y que más me interesa seguir conociendo...

Conseguí encontrar el buen camino, después de meses, incluso años, de sufrimiento ("La inutilidad del sufrimiento", autora Mª Jesús Alava Reyes) para descubrir cual es mi verdadera esencia, como mujer, como madre, como trabajadora, como ser vivo que forma parte de este planeta, de esta sociedad ("Por qué somos como somos" de Eduardo Punset).

Me centré en el amor, en la pasión, en querer encontrar a esa persona que idealizamos para compartir nuestro día a día ("Ya no sufro por amor" de Lucía Etxebarría).

Me centré en mis hijos, en la hiperactividad, en la educación, en su futuro, en darles una buena base como seres humanos, como personas ("Siddhartha" de Hermann Hesse).

Intenté cambiar mi suerte, mi destino es mío... empecé a emitir en positivo ("El Secreto" de Rhonda Byrne; "La Ley de la Atracción" de Michael Losier).

Leí, leí, leí...

Pensé, pensé, pensé...

Viví, viví y sobreviví...

Y aquí estoy, dispuesta a transmitir de nuevo mis sentimientos, mis pensamientos, empezando por lo que ha ocurrido en estos años separada de mi BLOG... hasta llegar al día de hoy.